"Incapaces de ver lo que en realidad ocurre con la pobreza, la falta de servicios elementales de educación, salud, empleo y algo peor: la satisfacción de necesidades vitales como alimentos, agua potable, techo y otras muchas", desfasados, prepotentes, los líderes imperiales siguen intentanto ignorar que hay un mundo allá afuera.
Un mundo, como recordara este jueves Fidel en su más reciente Reflexión, indócil, inmanejable, a pesar de la creencia imperial de que su poder es ilimitado. Una resistencia, que hoy significa sobrevivir.
El actual ejemplo: la #spanishrevolution, que ahora se esparce por toda Europa. Sobre el estallido, el líder de la Revolución cubana desliza una pregunta esencial: ¿qué pasará en España donde las masas protestan en las ciudades principales del país porque hasta el 40% de los jóvenes están desempleados, para citar solo una de las causas de las manifestaciones de ese combativo pueblo? ¿Es que acaso van a iniciarse los bombardeos a ese país de la OTAN?
No es descabellada la asociación y la interrogante, más cuando ya lo hicieron en pleno corazón de Europa, con la Guerra de los balcanes, y lo han demostrado luego una y otra vez, con bombas en Irak, Afganistán, Libia, y cualquier otro oscuro rincón del mundo que se muestre ingobernable, mientras prometen un mañana bajo “el reino de la libertad, la justicia, la igualdad de oportunidades y los derechos humanos”.
Ser irreverentes, persistir, como los jóvenes españoles, italianos, franceses... concuerdo con Fidel, es la única opción ética y la única salida.
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