¿Qué tienen en común los nuevos primeros ministros de Italia, Mario Monti, y Grecia, Lukas Papademus? Pues, que ambos salieron de la cantera de "talentos" de Goldman Sacha, el gigante financiero y guardián de los intereses de Wall $treet.
Mario Monti, recién nombrado primer ministro de Italia, pasó en 2005 a la nómina de Goldman Sachs al poco de dejar el cargo de comisario de la Competencia. En su organigrama aparecía desde entonces como miembro de su consejo de asesores internacionales, revela hoy en un post el diario El País.
Y Agrega que también fue ejecutivo de Goldman Sachs "el flamante presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi. Fue vicepresidente para Europa entre 2002 y 2005. Y también lidió con el banco de negocios estadounidense Lukas Papademos, el nuevo premier griego".
Según el diario, "la influencia de la firma financiera, por lo tanto, es enorme. Sus tentáculos llegan a todas las esquinas y eso le llevó a ganarse el sobrenombre de “gouvernement Sachs”".
Al decir de El País, lo que llama la atención es que la crisis de la deuda soberana en Europa tenga de nuevo como protagonista a la entidad hacia la que se dirigen todos los dedos acusadores de la crisis. Goldman Sachs fue, de hecho, un actor clave en el proceso que permitió a Grecia enmascarar parte de su deuda pública, cuando Papademos era gobernador del banco central heleno.
Cuando se cumplen tres años desde el colapso de Lehman Brothers, tampoco debe sorprender que en la calle cuestionen qué intereses representan realmente estos dirigentes.
Tiene el acento de Pontevedra, donde nació en 1943, y el entrenamiento internacional de haberse incorporado en 1973 a Le Monde Diplomatique, cuya edición francesa dirigió entre 1990 y 2008. Promotor, entre otras cosas, del Foro Social de Porto Alegre, Ignacio Ramonet se mueve con facilidad tanto en el análisis de los nuevos desafíos del periodismo como en el examen de las tendencias de la política mundial.
–Ya son diez años desde el 11 de septiembre de 2001.
–Y en el mismo mes, septiembre, tres años de la caída de Lehman Brothers.
–Esa ya es una definición.
–Pues claro.
–Esta entrevista no transcurre el 11 de septiembre de 2002, a un año del atentado. Por lo tanto el mundo que vivimos en 2011 registró ya muchos más cambios que la irrupción de Al Qaida con su ataque en territorio norteamericano.
–En estos diez años cambiaron los Estados Unidos. Poco después del atentado, la administración Bush utilizó el ataque a las Torres Gemelas como si lo hubiera estado esperando, para llevar a cabo una política neoimperial. Utilizar la fuerza del instrumento militar para imponer su voluntad política en particular en Medio Oriente.