El Presidente de Ecuador, Rafael Correa, condenó el golpe de Estado ocurrido en Honduras, y exigió que Manuel Zelaya sea restituido a su cargo de primer mandatario sin ningún condicionamiento.
Minutos antes de viajar a Nicaragua, donde miembros de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), se reunirán de emergencia para discutir la situación de Honduras, Correa señaló que las acciones militares y políticas que dejaron a Manuel Zelaya fuera de la Presidencia, demuestran que las élites y los poderes fácticos de América Latina quieren detener el despertar de los pueblos del continente.
Agregó que Ecuador apoyará cualquier sanción o acción política, económica, diplomática o comercial que se imponga a Honduras, como consecuencia del nombramiento del gobierno de facto de Roberto Micheletti.
AIN
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