sábado, 30 de mayo de 2015

Política exterior cubana en Salud: una aproximación a una experiencia sui-generis.

Médicos cubanos en Africa. Foto: Enrique Ubieta.


Por Daynet Rodríguez Sotomayor

Cuando el pasado mes de octubre se daba a conocer que el Secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki Moon, pedía en llamada telefónica al presidente cubano Raúl Castro la especial colaboración de la isla para combatir la epidemia de Ébola en el África Occidental, y días más tarde salían las primeras brigadas destinadas a Liberia, Guinea Conakry y Sierra Leona, el mundo tenía ante sí una muestra de solidaridad y altruismo de la Revolución cubana, que muchos, sobre todo enemigos de este proyecto social, todavía no alcanzan a entender. En el caso de esta epidemia, si bien casi instantáneamente se recibieron declaraciones de reconocimiento de amigos y adversarios, como las del secretario de Estado de Estados Unidos, John F. Kerry, quien elogió el «coraje de todo profesional médico que está asumiendo este desafío», e hizo una alusión breve a la contribución de Cuba (1), o las opiniones del diario estadounidense The New York Times cuando publicó que «Cuba ha enviado médicos y enfermeros a zonas de desastre durante décadas. Luego del huracán Katrina en 2005, el Gobierno en La Habana ofreció enviar equipos médicos para atender heridos en Nueva Orleans. Líderes estadounidenses rechazaron ese ofrecimiento. Pero se alegraron al oír, en días recientes, que Cuba estuviera movilizando un grupo para misiones en Sierra Leona, Liberia y Guinea» (2), desde esa esquina ideológica se suele reducir la solidaridad cubana en materia de salud (y en cualquier otra materia) a una acción de diplomacia médica que busca mejorar la imagen de Cuba en derechos humanos; y a nuestros médicos, como simples activos en el mercado de valores.

De ahí que una pregunta siga siendo pertinente y esencial: ¿Por qué y para qué Cuba envía médicos al exterior?

En primer lugar,  como no pudo dejar de reconocer The New York Times, la decisión de enviar al personal de salud a África no es nada nueva: es la continuidad de una tradición iniciada por aquel primer destacamento médico en Argelia y que luego se prolongaría con la ayuda a los movimientos de liberación nacional, y más acá en el tiempo, con la reactivación de la solidaridad médica tras el desastre dejado por el huracán Mitch en Centroamérica y la creación del destacamento Henry Reeve para brindar ayuda a Nueva Orleáns, luego del huracán Katrina.

En aquel entonces, el Comandante en Jefe Fidel Castro recordaba: “Ni una sola vez, a lo largo de su abnegada historia revolucionaria, nuestro pueblo dejó de ofrecer su ayuda médica solidaria en caso de catástrofes a otros pueblos que la requirieran, sin importar cuán abismales eran las diferencias ideológicas y políticas, o las graves ofensas recibidas de los gobiernos de cualquier país” (3).

“Nuestros conceptos sobre la condición humana de otros pueblos y el deber de la hermandad y la solidaridad jamás fueron ni serán traicionados. Decenas de miles de médicos y profesionales de la salud cubanos esparcidos por el mundo son testimonio irrebatible de lo que afirmo.  Para ellos no existirán jamás barreras idiomáticas, sacrificio, peligros u obstáculos. Se han cumplido ya 43 años desde que Cuba envió la primera brigada médica a Argelia, recién liberada del colonialismo tras heroica lucha por la independencia” (4), decía Fidel en aquella oportunidad.

Es decir, en un primer nivel de análisis, el internacionalismo específicamente médico puede explicarse desde un principio general, fundamental y clave de la política exterior cubana: el internacionalismo y la solidaridad entre los estados y pueblos, que también se rige por otros  pilares contenidos en el Derecho Internacional, como el Respeto a la soberanía, la independencia y la integridad territorial de los Estados, la Autodeterminación de los pueblos, la Igualdad soberana de los Estados y los pueblos, el Derecho a la cooperación internacional en beneficio e interés mutuo, equitativo entre los Estados, las Relaciones pacíficas entre los Estados y demás preceptos consagrados, recogidos en la Carta de la ONU.

Así, se han enviado cooperantes de la salud a lugares con un régimen político diferente al nuestro, e incluso, a países sin relaciones diplomáticas con Cuba. Dos casos, en diferentes momentos, pueden ser paradigmáticos: la ayuda enviada a la Nicaragua del dictador Somoza tras el terremoto de 1972; y el de Honduras, adonde en 1999 llegó una brigada luego del huracán Mitch y con cuyo gobierno tampoco se tenían relaciones.

Pero en un segundo nivel de análisis, los fundamentos que sostienen la solidaridad médica –que son los mismos que sostienen nuestra política exterior–, hay que buscarlos en la ética y el humanismo de la Revolución, para la cual nada es más importante que la vida de un ser humano, deudora de cuantos han brindado su ayuda solidaria a las luchas de varias generaciones de cubanos. Es la ética martiana que entiende que Patria es Humanidad, y fidelista, que nos recuerda que “ser internacionalista es saldar nuestra propia deuda con la humanidad. Quien no sea capaz de luchar por otros, no será nunca suficientemente capaz de luchar por sí mismo” (5). Es también la ética guevariana que parafraseando a Martí habla de sentir en la mejilla propia cualquier dolor causado en una mejilla ajena. Y es, en resumen, entender que sin injerencias ni irrespetos, las fronteras solidarias de Cuba acaban donde se necesite sanar cualquier dolor, a diferencia de las fronteras hegemónicas e imperialistas que terminan donde los tentáculos de las trasnacionales. Dos modos de ver la solidaridad y la cooperación que responden, en definitiva, a dos modelos ideológicos para comprender el mundo: socialismo y el capitalismo.

El escritor y filósofo cubano Enrique Ubieta, que ha testimoniado algunas de las más importantes misiones médicas cubanas de los últimos años, lo explica así en su libro La Utopía rearmada: “Cuba se enorgullece de contar con una tradición internacionalista de dos siglos: el que recibimos en nuestras luchas decimonónicas por la independencia –y cuyo más alto exponente es el general de origen dominicano Máximo Gómez– y el que consagra en su prédica y su acción fundadora José Martí, para quien Patria es humanidad” (6).


martes, 30 de diciembre de 2014

Sobre Tania Bruguera: NOTA OFICIAL DEL CONSEJO NACIONAL DE LAS ARTES PLÁSTICAS

El Consejo Nacional de las Artes Plásticas, luego de largas conversaciones con Tania Bruguera, ha decidido mantener su decisión de no apoyar el proyecto El susurro de Tatlin que la artista viene gestando a través de la plataforma Yo también exijo. Según las actuales circunstancias, resulta inaceptable la realización de este pretendido performance en el simbólico espacio de la Plaza de la Revolución, especialmente teniendo en cuenta la amplia cobertura mediática y la manipulación que ha tenido en los medios difusores de la contrarrevolución.

El CNAP ha propuesto a la artista un grupo de alternativas y principios a partir de los cuales se podría desarrollar esta acción. Dichas alternativas se sustentan en: mover el performance de la Plaza de la Revolución para una institución cultural de prestigio en el ámbito de las artes visuales, teniendo en cuenta que es una actividad desde el arte y ese debería ser su escenario natural; el espacio que se decida estaría abierto libremente a las más diversas personas de sectores sociales disímiles. Sin embargo, se reserva el derecho de admisión a sujetos cuyo único interés sea la provocación en función de generar conflictos que pongan en riesgo la libertad de creación que ha caracterizado la gestión de nuestras instituciones. Y por último, la duración del performance no sería ilimitada, sino que extendería por 1 hora y 30 minutos, tiempo suficiente para que una considerable cantidad de asistentes emitan libremente sus juicios, criterios y propuestas. Lamentablemente la artista ha decido rechazar estos principios.

La Habana, 29 de diciembre del 2014

Artistas plásticos cubanos: No somos ingenuos

Declaración de la Presidencia de la Asociación de Artistas Plásticos de la UNEAC

La conocida artista Tania Bruguera ha convocado a un supuesto performance este 30 de diciembre en la emblemática Plaza de la Revolución en La Habana. Ello ha sucedido al margen de cualquier institución cubana y, como sucede en esos casos, la iniciativa ha sido ampliamente difundida por medios de la contrarrevolución, especialmente por el libelo Diario de Cuba, que tomó tempranamente partido contra las declaraciones de los presidentes Raúl Castro y Barack Obama del pasado 17 de diciembre. Llevamos años en esta batalla frente a los enemigos de la Revolución. No somos ingenuos, el significado de este performance no va a ser interpretado en modo alguno como una obra artística. Se trata de una provocación política, orientada en el mismo sentido de las tesis de los que la han difundido.

Esta acción no persigue otro propósito que el de situarse en contra de las negociaciones que dan esperanza a muchos seres humanos, en primer lugar a los once millones de cubanos. Será secundada, si acaso, por los pocos mercenarios locales de la política que el mismo Presidente Obama ha considerado fracasada, por los únicos que podrían esperar beneficios de cualquier intento por obstaculizar las negociaciones en curso.

Los escritores y artistas cubanos merecen conocer esta nueva maniobra y no se dejarán confundir por una operación que pretende presentar este performance como un proyecto de pura creación artística. Su evidente intención política se afirma en el propio mensaje de una artista que no busca otra cosa que un protagonismo circunstancial. 

Todo nuestro pueblo festeja hoy el regreso a la Patria de nuestros Cinco Héroes, así como el anuncio del restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Cuba y los Estados Unidos. Rechazamos cualquier acción oportunista que trate de opacar este momento histórico.



miércoles, 17 de diciembre de 2014

¡Y volvieron! (+ Alocución íntegra de Raúl)


DRS

Desde que en horas de la mañana se interrumpió la programación habitual de la Televisión cubana para decir que nuestro presidente hablaría al pueblo, y luego los medios de prensa comenzaron a difundir que Alan Gross ya iba rumbo a Estados Unidos y que la liberación de nuestros hermanos presos era una realidad, he estado recordando cuanto tiempo llevamos en esta lucha y que siempre pensé en la libertad de #LosCinco como el más grande anhelo, pero también como una utopía. ¿Tendría algún ejecutivo norteamericano la valentía política y el gesto de enviarlos a Cuba? Hoy Obama respondió la pregunta. Y yo recibí la noticia como un shock: una mezcla de incredulidad y alegría. Y mis primeros pensamientos fueron para René y Fernando que tantas veces han hablando de una felicidad incompleta porque les faltan tres hermanos; para Adriana, que espera por Gerardo y ansía su primer hijo, para Elizabeth la eterna amada de Ramón, y para Mirtha, que ha sobrepuesto su fortaleza de espíritu y su férrea voluntad a una salud quebrantada, con tal de ver y abrazar en libertad a su hijo Tony. También pensé en nuestro Comandante, que siempre dijo que volverían y una vez más NO NOS FALLA; y en la Revolución que nunca abandona a sus hijos. En ese interin, fueron muchas las llamadas entre familiares y amigos, y muchas las expresiones de regocijo en twitter. Aquí en nuestra redacción una pantrista entró preguntando: ¿Y los nuestros dónde están? ¿ya están aquí? Los nuestros, dijo. Y así sintetizó mejor que nadie esta causa que nos ha unido a todos los cubanos. A ella, a todos, Raúl nos confirmó: están en Cuba, en su patria. Ya sabemos que nada podrá devolverle tantos años de duro y cruel encierro, pero se puso término a la injusticia. Del paso histórico que significa el restablecimiento de relaciones entre EE.UU y Cuba no he meditado aún, pero si resuenan en mi cabeza algunas frases e ideas: sigue intacto el bloqueo, igualdad soberana, voluntad de dialogar, medidas mutuas, autodeterminación, respeto. Pero eso es tema de otro análisis. Primero prefiero saborear este eufórico momento (sin imágenes todavía) en el que me siento acompañada por millones de cubanos y amigos solidarios: tenemos a los Cinco, al fin, en casa.

Alocución del Presidente de Cuba

A continuación transmitimos íntegramente la Alocución del General de Ejército Raúl Castro Ruz, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, al pueblo de Cuba y a la opinión pública internacional.

Compatriotas:

Desde mi elección como Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, he reiterado en múltiples ocasiones, nuestra disposición a sostener con el gobierno de los Estados Unidos un diálogo respetuoso, basado en la igualdad soberana, para tratar los más diversos temas de forma recíproca, sin menoscabo a la independencia nacional y la autodeterminación de nuestro pueblo.

jueves, 11 de diciembre de 2014

Ratifica viceministro voluntad estatal de ampliar acceso a internet en Cuba


Daynet Rodríguez Sotomayor/Publicado en Cubasi.cu

El viceministro cubano de Comunicaciones, Wilfredo González, ratificó la voluntad estatal de multiplicar el acceso a internet en la Isla, en un encuentro este miércoles con estudiantes y profesores de la Universidad de la Habana.

En un foro debate sobre Subversión y Nuevas Tecnologías, inserto en las jornadas de celebración en Cuba del Día mundial de los Derechos Humanos, el vicetitular expresó que “no existe ninguna restricción política para ampliar el acceso a Internet, y en la medida que las posibilidades económicas lo permitan vamos a ampliar esas posibilidades”, incluido el acceso inalámbrico desde los hogares.

En su intervención ante los jóvenes, González abordó algunos desafíos que caracterizan a Cuba en el tema: hoy el país se ubica en el lugar 14 en cuanto a preparación de sus habitantes para el uso de las Nuevas Tecnologías, y sin embargo se sitúa en una posición 153, de 157 naciones, en materia de infraestructura.

En Cuba existe hoy una brecha digital real, dijo en alusión a esa distancia entre conocimientos y capacidades económicas, y aseguró que el enemigo usa esa brecha para aumentar la subversión ideológica contra el proyecto social en la isla. En ese sentido ejemplificó con los intentos del Zunzuneo y el Piramideo, creados y financiados para desestabilizar a la Revolución y dirigidos, fundamentalmente, a los jóvenes.

González también recordó lo que el país ha venido haciendo para disminuir esa brecha y seguir propiciando la informatización de la sociedad, al precisar que hoy se contabilizan unas 400 mil cuentas abonadas al servicio Nauta de correo electrónico.

Además, “en junio del 2013 se ampliaron los servicios con 118 salas de acceso a Internet y ya estamos en 154, y pronto vamos a incorporarlo a los Joven Club de Computación”, afirmó como una muestra de esa voluntad de continuar llevando los beneficios de las nuevas tecnologías a todo el pueblo.

Nuevas tecnologías: la cultura como resistencia

En el foro-debate, los jóvenes universitarios de la más antigua Casa de Altos Estudios de Cuba, mostraron sus inquietudes y sugerencias sobre el uso de las Nuevas Tecnologías, internet y subversión a un panel de intelectuales compuesto además por Abel Prieto, asesor del presidente cubano, el escritor y profesor Raúl Capote, y el rector Gustavo Cobreiro, entre otros.

Hansell Oro, estudiante de quinto año de la Facultad de Comunicación, se refirió a la necesidad de fomentar un pensamiento crítico y una nueva alfabetización tecnológica, mientras Ernesto Domínguez, de la carrera de Matemática, reflexionó sobre qué hacer como consumidores ante la avalancha de información y el caos digital.

Raúl Capote, a propósito de la intervención de los jóvenes, habló desde su experiencia como escritor y ex-agente CIA en Cuba sobre el concepto de democracia del consumo del capitalismo, los numerosos intentos de guerra cultural contra la isla a través de las nuevas tecnologías y la promoción de un patrón de éxito basado en el culto falso a los objetos.

Según Capote, se trata de fomentar en la isla una masa acrítica, de seres incapaces de cuestionarse el poder del capital.

"Es importante usar las Nuevas Tecnologías sin deslumbramiento y sin adicción", recomendó Abel Prieto a los universitarios. En su opinión, "es ridículo luchar contra las nuevas tecnologías". Al contrario, "hay que seguir preparando a los jóvenes en su uso y explotación".

El asesor del presidente cubano y ex-ministro de Cultura, coincidió con los estudiantes en la necesidad de revisar los espacios que se han dejado a la mediocridad, y de potenciar la producción de contenidos nacionales, hechos por los jóvenes.

Abel manifestó su preocupación por el retroceso de la lectura ante la avalancha tecnológica en el mundo y sugirió a los estudiantes como estrategia de elección regresar siempre al cine, a los libros, a la "poderosa cultura popular" que nos ha permitido resistir.

Recomendó, igulamente, una mirada inteligente ante la superficialidad. "Es un momento de estar muy alertas y al mismo tiempo darle instrumentos a la gente para aumentar el debate", concluyó.

En el foro se conoció que la Universidad de La Habana es una de la instituciones quizás en mejores condiciones de conectividad en Cuba, según explicó el rector Gustavo Cobreiro, quien adelantó que ya se trabaja en la instalación de la red inalámbrica en el centro, para uso educacional de estudiantes y profesores.

La jornada por el día internacional de los Derechos Humanos estimuló el desarrollo de debates en centros como el Instituto Superior de Diseño, la Uni­versidad de Ciencias Médicas de La Ha­bana, el Instituto Superior Politécnico José Antonio Echevarría, la Universidad de Cien­cias de la Cultura Física y el Deporte Manuel Fajardo, el Instituto Superior de Arte, la Universidad de Ciencias Pedagógicas Enrique José Varona, entre otras.

miércoles, 8 de octubre de 2014

Che: ¿dónde te puedo escribir?


Che: ¿dónde te puedo escribir? Me dirás que a cualquier parte, a un minero boliviano, a una madre peruana, al guerrillero que está o no está pero estará. Todo esto lo sé, Che, tú mismo me lo enseñaste, y además esta carta no sería para ti. Cómo decirte que nunca había llorado tanto desde la noche en que mataron a Frank, y eso que esta vez no lo creía. Todos estaban seguros, y yo decía: no es posible, una bala no puede terminar el infinito, Fidel y tú tienen que vivir, si ustedes no viven, cómo vivir. Hace catorce años veo morir a seres tan inmensamente queridos, que hoy me siento cansada de vivir, creo que ya he vivido demasiado, el sol no lo veo tan bello, la palma, no siento placer en verla; a veces, como ahora, a pesar de gustarme tanto la vida, que por esas dos cosas vale la pena abrir los ojos cada mañana, siento deseos de tenerlos cerrados como ellos, como tú.

Cómo puede ser cierto, este continente no merece eso; con tus ojos abiertos, América Latina tenía su camino pronto. Che, lo único que pudo consolarme es haber ido, pero no fui, junto a Fidel estoy, he hecho siempre lo que él desee que yo haga. ¿Te acuerdas?, me lo prometiste en la Sierra, me dijiste: no extrañarás el café, tendremos mate. No tenías fronteras, pero me prometiste que me llamarías cuando fuera en tu Argentina, y cómo lo esperaba, sabía bien que lo cumplirías. Ya no puede ser, no pudiste, no pude. Fidel lo dijo, tiene que ser verdad, qué tristeza. No podía decir "Che", tomaba fuerzas y decía "Ernesto Guevara", así se lo comunicaba al pueblo, a tu pueblo. Qué tristeza tan profunda, lloraba por el pueblo, por Fidel, por ti, porque ya no puedo. Después, en la velada, este gran pueblo no sabía qué grados te pondría Fidel. Te los puso: artista. Yo pensaba que todos los grados eran pocos, chicos, y Fidel, como siempre, encontró los verdaderos: todo lo que creaste fue perfecto, pero hiciste una creación única, te hiciste a ti mismo, demostraste cómo es posible ese hombre nuevo, todos veríamos así que ese hombre nuevo es la realidad, porque existe, eres tú. Que más puedo decirte, Che. Si supiera, como tú, decir las cosas. De todas maneras, una vez me escribiste: "Veo que te has convertido en una literata con dominio de la síntesis, pero te confieso que como más me gustas es en un día de año nuevo, con todos los fusibles disparados y tirando cañonazos a la redonda. Esa imagen y la de la Sierra (hasta nuestras peleas de aquellos días me son gratas en el recuerdo) son las que llevaré de ti para uso propio". Por eso no podré escribir nunca nada de ti y tendrás siempre ese recuerdo.

Hasta la victoria siempre, Che querido.

Haydée [Carta de Haydée Santamaría al Che Guevara, escrita después de su asesinato en Bolivia.]

martes, 23 de septiembre de 2014

¿Son las vacas las culpables del cambio climático? (+ INFOGRAFÍA)


Daynet Rodríguez Sotomayor



Mientras los líderes mundiales comienzan a llegar a la ONU para la cumbre global sobre el cambio climático y cientos de miles de personas marcharon este domingo en 2.808 ciudades para pedir medidas urgentes, un audiovisual sobre el tema suscitó polémica y llamó la atención de redes sociales y medios de prensa.

En un video difundido a través de Youtube, el famoso exbeatle Paul McCartney pidió "hacerse vegetariano por un día y no comer carne los lunes", lo que en nuestro sitio web inmediatamente comenzó a generar comentarios, algunos indignados, de los lectores. ¿Se volvió loco el músico?

El contexto de esta petición es un estudio reciente que asegura que "el ganado vacuno demanda veintiocho veces más tierra y once veces más irrigación que los porcinos y las aves, y su carne es diez veces más costosa al ambiente".

Según la investigación, publicada por Proceedings of the National Academy of Sciences y replicada por Cubasí el pasado mes de julio, este tipo de ganado emite “cinco veces más gases y consume seis veces más nitrógeno que la producción de huevos o carne de aves”.

Teniendo en cuenta esos datos y muy, muy sensibilizados con el tema de la contaminación ambiental, podría entenderse un poco la petición del exbeatle. Pero inmediatamente me asaltan varias preguntas: ¿Son las vacas las culpables, las mayores culpables, del cambio climático? ¿Dónde queda la emisión de gases tóxicos de fábricas, industrias altamente contaminantes como la petrolera, o la circulación diaria de millones de carros en todo el mundo? ¿Tienen las vacas responsabilidad en que se haya avanzado muy poco, a pesar del acuerdo de los gobiernos sobre la necesidad de reducir las emisiones para limitar el aumento de la temperatura mundial a menos de 2°C, que se adoptó en la Cumbre de Cancún en 2010?

Igualmente una se cuestiona qué tienen que ver los vacunos con la deuda climática de las naciones industrializadas, que por siglos han saturado la atmósfera de gases de efecto invernadero, y que es varias veces mayor a la de los países en vías de desarrollo. ¿Debemos pagar justos por pecadores?

En ese sentido, tampoco es moral pedirle a quienes han padecido una dieta vegetariana obligada: los millones de hambrientos en el llamado Tercer Mundo, y hasta los 40 millones de pobres que tiene en su seno  EE.UU., que no coman carne, aunque sea por un día.

En fin. No creo que las vacas puedan tener todas las culpas sobre sí, y mucho menos deben pagar porque las naciones desarrolladas incumplen año tras año con el objetivos de reducir sus emisiones a la atmósfera y se nieguen, además, a transferir tecnologías más limpias hacia los países en vías de desarrollo para sanear sus economías.

Pero en algo sí concuerdo con esta petición: los patrones consumistas (ojo que no hablo de consumo) de la humanidad deben cambiar. Mientras el hombre siga depredando la naturaleza a ritmos que le impiden regenerarse, y mientras haya un sistema de distribución desigual de los recursos, que favorecen a unos pocos y perjudican a las mayorías, el futuro de la humanidad se seguirá viendo comprometido. Y los efectos del cambio climático no van a distinguir entre quienes han contaminado más o menos. Por eso, en la cruzada por defender la capa de ozono, espero se sigan sumando voces sensibles. Pero no contra objetivos tan elementales como las vacas. ¿Se atrevería Ringo Starr, por ejemplo, a pedir un día sin circulación de automóviles en todas las grandes ciudades del mundo? Eso sí sería un perfecto tiro al blanco.

Publicado en Cubasi.cu



miércoles, 13 de agosto de 2014

Fidel, Quijote de este tiempo


Muuuuchas felicidades #Fidel!!! Gracias por tu lucha, por tu ejemplo, tu inteligencia y tu picardía... Por personificar los ideales libertarios y por convencernos de que otro Mundo, más bueno, más justo, es posible. Por perseguir sin descanso sueños imposibles, y hacerlos realidad, y por ser el Quijote de este tiempo, que es en resumen, el tiempo de todos los revolucionarios que en el mundo han sido. Gracias por tu sonrisa, y tu barba rebelde. Y por alentar a otros locos buenos: el amado Chávez, Evo, Lula, Kirchner. Ni tus enemigos han podido dejar de reconocer tu estatura guerrera y tu encanto personal, casi místico. Y tu pueblo, te aseguro, jamás olvidará lo que has hecho, lo que sigues haciendo. Porque antes de creer en Revolución y Socialismo, creímos en ti, y fuimos fidelistas. Gracias por todo, mi comandante. Gracias por todo, Fidel.

martes, 12 de agosto de 2014

Los niños en Gaza, víctimas psicológicas del conflicto


Varios niños se reúnen en el patio de una escuela-albergue en Gaza pero no son los juegos lo que centra su atención, sino un grupo de psicoterapeutas que tienen como misión tratar el estrés y el miedo de los menores.

Cuando Israel lanzó su ofensiva sobre la franja costera hace ya más de un mes, la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA) habilitó la mayoría de sus escuelas en ella para ofrecer refugio a las cerca de 200.000 personas que abandonaron sus hogares, muchos ahora destruidos o seriamente dañados por los bombardeos aéreos y ataques de la artillería israelí.

Abrumados por la violencia, los niños que fueron acogidos en estas escuelas-albergue pasan su tiempo con psicoterapeutas que juegan con ellos, les ayudan a dibujar y les cuentan relatos como parte de la terapia para minimizar el estrés y la tensión que padecen.

Estos especialistas son también palestinos residentes en Gaza, hombres y mujeres que voluntariamente han decidido poner a disposición de los demás sus conocimientos en educación y psicología y su habilidad para tratar con niños en etapas de crisis.

No sólo deben mantener a los pequeños entretenidos, sino también ayudarles a superar los temores que les produce haber perdido sus hogares.